Sopeso la carga que el tiempo
fue acumulando en mis costillas.
Ya no soy una,
soy mil capas
que se fueron creando,
uniendo,
formando
con cada crecida del alma.
¡Y se desbordaron
los torrentes de sentimientos
tantas veces ¡
Y fue quedando un poso,
y el poso dejo peso
y el peso que no se pasa
y pisa con fuerza sobre el piso.
Una vez más…sopeso.
Y le salieron grietas
a la piel de cada capa,
un costura un grito,
un grieta un instante largo.
Por las pieles que soy
derramaré todo lo fui,
todo lo que seré….
Por los poros de cada piel
sudaré cada poso
que fui acumulando en mi tiempo.
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