Le robé una estrella a la noche,
un día de cuencos vacíos
y sordas miserias.
Quise colgarla de un recuerdo venidero,
de un futuro que ya fue,
de un pasado que está por venir.
Con la esperanza de que su luz
guiara los dos caminos
y ambos llegaran a convergir en algún punto.
(Soy tan torpe, que aún sigo esperando que esto ocurra)
Almaceno gotitas de rocío
en pequeños receptáculos florales,
las esencias de las grandes cosas
me gusta guardarlas en mínimos espacios.
Lo importante me lo quedo en chiquito
y cerca del corazón o de las manos.
(Soy tan torpe, que nunca supe cuál sería el mejor sitio).
Abundancia de traspiés
en el recuento de situaciones ocasionales.
Las punteras de los zapatos
ya van despellejadas y en cuero vivo.
No sé poner parches en los dolores
ni tampoco escayolar las grietas.
Soy tan torpe que me muevo por la vida
con los costurones a medio cerrar
y el alma a medio abrir.
un día de cuencos vacíos
y sordas miserias.
Quise colgarla de un recuerdo venidero,
de un futuro que ya fue,
de un pasado que está por venir.
Con la esperanza de que su luz
guiara los dos caminos
y ambos llegaran a convergir en algún punto.
(Soy tan torpe, que aún sigo esperando que esto ocurra)
Almaceno gotitas de rocío
en pequeños receptáculos florales,
las esencias de las grandes cosas
me gusta guardarlas en mínimos espacios.
Lo importante me lo quedo en chiquito
y cerca del corazón o de las manos.
(Soy tan torpe, que nunca supe cuál sería el mejor sitio).
Abundancia de traspiés
en el recuento de situaciones ocasionales.
Las punteras de los zapatos
ya van despellejadas y en cuero vivo.
No sé poner parches en los dolores
ni tampoco escayolar las grietas.
Soy tan torpe que me muevo por la vida
con los costurones a medio cerrar
y el alma a medio abrir.
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