En la mirada difusa
de unos ojos
cansados de ver,
el arcoíris se derrite
como vela en la llama.
Letanía de colores
que va de
los rojos pasión,
pasando por
los naranjas ocasos,
hasta los
malva fragancia….
Mi mano blanca
se desliza por el papel gris,
describiendo una suerte
de poema negro.
Posiciono un cristal
entre los versos
y la luz que entra
por la ventana.
Un arcoíris aparece
sobre el poema.
Versos oscuros
vestidos de colores.
Disfraz y antifaz de las
palabras.
En la bruma,
se van perdiendo
las notas de un réquiem.
Hay una luz
que se ve
tenue,
frágil,
como lamparilla,
que dibuja
un sendero
sinuoso
y débil.
Me gusta ese "disfraz y antifaz" de las palabras...
ResponderEliminarUn abrazo y feliz domingo.