Escondí bajo la cama
pequeños fragmentos
de grandes días.
Los escombros buscan sitio,
pero aquí no permito que entren.
Escribí bajo la piel
versos puros,
cuando las notas musicales vuelan,
la sensibilidad recorre
cada poro de mi cuerpo.
Me elevo.
La primavera hizo un pacto con la Luna
y por eso las noches danzan
y los días huelen a vida.
Abro una ventana,
en las noches lunares,
y reviso mis fragmentos de grandes días,
y reescribo algún poema bajo la piel.
Parece que los días volverán
cuando menos lo espere.
Y es que todos tenemos y "guardamos" esos "pequeños fragmentos" a los que hace mención tu protagonista...
ResponderEliminarUn abrazo y feliz lunes.